Lo que nos dice el Señor hoy (Tiempo Ordinario)

Lunes X Tiempo Ordinario
Reflexión del Evangelio​

SEÑOR Jesús, hazme vivir el evangelio de las bienaventuranzas, tu programa de vida para nosotros, el camino de tu Reino, el seguimiento que nos hace libres y auténticos. Nuestro auxilio es el nombre del Señor, que hizo el cielo y la tierra (Salmo 120, 2).

 

Martes X Tiempo Ordinario
Santo Evangelio​

Dijo Jesús a sus apóstoles: <<Id y proclamad que ha llegado el reino de los cielos. Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos, arrojad demonios. Gratis habéis recibido, dad gratis. No os procuréis en la faja oro, plata, ni cobre; ni tampoco alforja por el camino, ni dos túnicas, ni sandalias, ni bastón; bien merece el obrero su sustento. Cuando entréis en una ciudad o aldea, averiguad quien hay allí de confianza y quedaos en su casa hasta que os vayáis. Al entrar en una casa, saludadla con la paz; si la casa se lo merece, vuestra paz vendrá a ella. Si no se lo merece, la paz volverá a vosotros>>.

Hechos de los Apóstoles 11, 21b – 26 – 13. 1 – 3
Salmo 97, 1 – 6
Mateo 10, 7 – 13​

 

Martes X Tiempo ordinario
Reflexión del Evangelio​

SEÑOR Jesús, es urgente la misión, quiero estar dispuesto a anunciarte con mi vida y con mis obras de amor. Necesito tu Espíritu, tu fuerza, envíame. El Señor revela a las naciones su justicia (salmo 97, 2b).

 

Miércoles X Tiempo Ordinario
Santo Evangelio​

Dijo Jesús a sus discípulos: <<No creáis que he venido a abolir la Ley y los Profetas: no he venido a abolir, sino a dar plenitud. En verdad os digo que antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse hasta la última letra o tilde de la Ley. El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes, y se lo enseñe así a los hombres será el menos importante en el reino de los cielos. Pero quien los cumpla y enseñe será grande en el reino de los cielos>>.

1 Reyes 18, 20 – 39
Salmo 15, 1b – 2a. 4 – 5. 8. 11
Mateo 5, 17 – 19​

 

Miércoles X Tiempo Ordinario
Reflexión del Evangelio​

SEÑOR Jesús, me llamas a vivir tu Evangelio íntegramente, sin escoger páginas, sino como un todo que me orienta y me guía. Que tu gracia me ayude a cumplirlo en mi vida. Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti (Salmo 15, 1b).

 

Jueves X Tiempo Ordinario
Santo Evangelio​

Dijo Jesús a sus discípulos: <<Si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos. Habéis oído que se dijo a los antiguas: “No matarás”, y el que mate será reo de juicio. Pero yo os digo: todo el que se deja llevar por la cólera contra su hermano será procesado. Y si uno llama a su hermano “imbécil”, tendrá que comparecer ante el Sanedrín, y si lo llama “necio” merece la condena de la del fuego. Por tanto, si cuando vas a presentar tu ofrenda sobre el altar, te acuerdas allí mismo de que tu hermano tiene quejas contra ti, deja allí tu ofrenda ante el altar y vete primero a reconciliarte con tu hermano, y entonces vuelve a presentar tu ofrenda. Con el que te pone pleito, procura arreglarte enseguida, mientras vais todavía de camino, no sea que te entregue al juez, y el juez al alguacil, y te metan en la cárcel. En verdad te digo que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último céntimo>>.

1 Reyes 18, 41 – 46
Salmo 64, 10 – 13
Mateo 5, 20 – 26​

 

Jueves X Tiempo Ordinario
Reflexión del Evangelio​

SEÑOR, me invitas a vivir un amor semejante al tuyo, total, sin fronteras y desde ahí un culto autentico que brota de la vivencia de ese amor. Quiero vivir en esa coherencia. Ayúdame. Oh Dios, tú mereces un himno en Sion (Salmo 64, 2a).

 

Viernes X Tiempo Ordinario
Santo Evangelio​

Dijo Jesús a sus discípulos: <<Habéis oído que se dijo: “No cometerás adulterio”. Pero yo os digo: todo el que mira a una mujer deseándola, ya ha cometido adulterio con ella en su corazón. Si tu ojo derecho te induce a pecar, sácatelo y tíralo. Más te vale perder un miembro que ser echado entero en la “gehenna”. Si tu mano derecha te induce a pecar, córtatela y tírala, porque más te vale perder un miembro que ir a parar entero a la “gehenna”. Se dijo: “El que repudie a su mujer, que le dé acta de repudio”. Pero yo os digo: si uno repudia a su mujer -no hablo de unión ilegítima- la induce a cometer adulterio, y el que se casa con la repudiada comete adulterio>>.

1 Reyes 19, 9a. 11 – 16
Salmo 26, 7 – 9. 13 – 14
Mateo 5, 27 – 32​

 

Viernes X Tiempo Ordinario
Reflexión del Evangelio​

SEÑOR, la limpieza de corazón es una de tus bienaventuranzas. Desde un corazón limpio, tenga yo igualmente una mirada limpia, sin deseos que me alejen de tu voluntad. Tu rostro buscaré, Señor (Salmo 26, 8c).

 

Sábado X Tiempo Ordinario
Santo Evangelio​

Dijo Jesús a sus discípulos: <<Habéis oído que se dijo a los antiguos: “No jurarás en falso” y “cumplirás tus juramentos al Señor”. Pero yo os digo que no juréis en absoluto: ni por el cielo, que es el trono de Dios; ni por la tierra, estrado de sus pies; ni por Jerusalén, que es la ciudad de el Gran Rey. Ni jures por tu cabeza, pues no puedes volver blanco o negro un solo cabello. Que vuestro hablar sea sí, sí, no, no. Lo que pasa de ahí viene del Maligno>>.

1 Reyes 19, 19 – 21
Salmo 15, 1b – 2a. 5. 7 – 10
Mateo 5, 33 – 37​

 

Sábado X Tiempo Ordinario
Reflexión del Evangelio​

SEÑOR Jesús, a veces vivo confuso y convergen en mi sentimientos y deseos contrarios. Dame claridad de espíritu para saber distinguir el bien del mal y vivir cumpliendo tu voluntad. Tú eres, Señor, el lote de mi heredad (Salmo 15, 5a).

 

Domingo XI Tiempo Ordinario
Primera Lectura​

Esto dice el Señor Dios: “También yo había escogido una rama del alto cedro y la había plantado; de las más altas y jóvenes ramas arrancaré una tierna y la plantaré en la cumbre de un monte elevado; la plantaré en una montaña alta de Israel, echará brotes y dará fruto. Se hará un cedro magnifico. Aves de todas clases anidarán al abrigo de sus ramas. Y reconocerán todos los árboles del campo que yo soy el Señor, que humillo al árbol elevado y exalto al humilde, hago secarse el árbol verde y florecer al árbol seco. Yo, el Señor, lo he dicho y lo haré”.

Ezequiel (Los Libros Proféticos son seis y Ezequiel es el quinto. Su misión era dirigida a los cautivos con el deseo de mantenerlos fieles a Dios y alejarlos de la fuerte idolatría que reinaba en la región. Ezequiel preludia la Figura evangélica de Jesús como buen Pastor. Todo del Antiguo Testamento) 17, 22 – 24

 

Domingo XI Tiempo Ordinario
Segunda Lectura​

Hermanos: Siempre llenos de buen ánimo y sabiendo que, mientras habitamos en el cuerpo, estamos desterrados lejos del Señor, caminamos en fe y no en visión. Pero estamos de buen ánimo y preferimos ser desterrados del cuerpo y vivir junto al Señor. Por lo cual, en destierro o en patria, nos esforzamos en agradarlo. Porque todos tenemos que comparecer ante el tribunal de Cristo, para recibir cada cual por lo que haya hecho mientras tenía este cuerpo, sea el bien o el mal.

2 Corintios (2Corintios es la segunda carta de San Pablo que se dividen en dos partes y esta es la segunda. Aquí trata de la Iglesia en Jerusalén; el apóstol llama a la confianza en nuestro Señor Jesucristo. Todo del Nuevo Testamento) 5, 6 – 10

 

Domingo XI Tiempo Ordinario
Es bueno darte gracias, Señor.
Santo Evangelio​

Decía Jesús al gentío: <<El reino de Dios se parece a un hombre que echa semilla en la tierra. Él duerme de noche y se levanta de mañana; la semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo. La tierra va produciendo fruto sola: primero los tallos, luego la espiga, después el grano. Cuando el grano está a punto, se mete la hoz, porque ha llegado la siega>>. Dijo también: <<¿Con qué podemos comparar también el Reino de Dios? ¿Qué parábola usaremos? Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la semilla más pequeña, pero después de sembrada crece, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros del cielo pueden anidar a su sombra>>. Con muchas parábolas parecidas les exponía la palabra, acomodándose a su entender. Todo se lo exponía con parábolas, pero a sus discípulos se lo explicaba todo en privado.

Marcos 4, 26 – 34​

 

Domingo XI Tiempo Ordinario
Reflexión del Evangelio​

Tu Reino, Señor, sea siempre nuestra prioridad. Que seamos instrumentos de esta fuerza misteriosa, semilla poderosa, que al germinar despliega toda su fuerza regeneradora y transformadora.

 

Lunes XI Tiempo Ordinario
Santo Evangelio​

Dijo Jesús a sus discípulos: <<Habéis oído que se dijo: “Ojo por ojo, diente por diente”. Pero yo os digo: no hagáis frente al que os agravia. Al contrario, si uno te abofetea en la mejilla derecha, preséntale la otra; al que quiera ponerte pleito para quitarte la túnica, dale también el manto; a quien te requiera para caminar una milla, acompáñale dos; a quien te pide, dale, y al que te pide prestado, no lo rehúyas>>.

1 Reyes 21, 1 – 16
Salmo 5, 2 – 3ab. 5 – 7
Mateo 5, 38 – 42​

 

Lunes XI Tiempo Ordinario
Reflexión del Evangelio​

Jesús, la nueva ley del amor nos lleva a perdonar y olvidar, no sirve el devolver en justicia, pides más: el perdón total. Elimina de nuestro corazón todo resquicio de venganza y rencor. Atiende a mis gemidos, Señor (Salmo 5, 2b).

 

Martes XI Tiempo Ordinario
Santo Evangelio​

Dijo Jesús a sus discípulos: <<Habéis oído que se dijo: “Amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo”. Pero yo os digo: amad a vuestros enemigos, y rezad por los que os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿no hacen lo mismo también los publicanos? Y si saludáis solo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto>>.

1 Reyes 21, 17 – 29
Salmo 50, 3 – 6b. 11. 16
Mateo 5, 43 – 48​

 

Martes XI Tiempo Ordinario
Reflexión del Evangelio​

SEÑOR Jesús, nos enseñas que el amor cristiano llega hasta el perdón a los enemigos. La perfección es amar así, hasta ese extremo. Nos das ejemplo en la Cruz. Conviértenos a tu amor. Misericordia, Señor, hemos pecado (Salmo 50, 3a).

 

Miércoles XI Tiempo Ordinario
Santo Evangelio​

Dijo Jesús a sus discípulos: <<Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de lo contrario, no tendréis recompensa de vuestro Padre Celestial. Por tanto, cuando hagas limosna, no mandes tocar la trompeta ante ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y por las calles, para ser honrados por la gente; en verdad os digo que ya han recibido su recompensa. Tú, en cambio, cuando hagas limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha; así tu limosna quedará en secreto, y tu Padre, que ve en lo secreto, te lo recompensará. Cuando oréis, no seáis como los hipócritas, a quienes les gusta rezar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las plazas, para que los vean los hombres. En verdad os digo que ya han recibido su recompensa. Tú, cuando ores, entra en tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu Padre, que está en lo secreto, y tu Padre que ve en lo secreto, te lo recompensará. Cuando ayunéis, no pongáis cara triste, como los hipócritas, que desfiguran sus rostros para hacer ver a los hombres que ayunan. En verdad os digo que ya han recibido su paga. Tú, en cambio, cuando ayunes, perfúmate la cabeza y lávate la cara, para que tu ayuno lo note, no los hombres, sino tu Padre, que está en lo escondido; y tu Padre, que ve en lo escondido, te recompensará>>.

2 Reyes 2, 1. 6 – 14
Salmo 30, 20. 21. 24
Mateo 6, 1 – 6. 16 – 18​